lunes, 30 de noviembre de 2009

EL CIRUJANO

Mañana en la mañana abriré tu corazón le explicaba el cirujano a un niño. Y el niño interrumpió:

- ¿Usted encontrará a Jesús allí?

El cirujano se quedó mirándolo, y continuó:

- Cortaré una pared de tu corazón para ver el daño completo.

- Pero cuando abra mi corazón, ¿encontrará a Jesús ahí?, volvió a interrumpir el niño.

El cirujano se volvió hacia los padres, quienes estaban sentados tranquilamente.

- Cuando haya visto todo el daño allí, planearemos lo que sigue, ya con tu corazón abierto.

- Pero, ¿usted encontrará a Jesús en mi corazón? La Biblia bien claro dice que Él vive allí. Las alabanzas todas dicen que Él vive allí....- ¡Entonces usted lo encontrará en mi corazón!

El cirujano pensó que era suficiente y le explicó:

- Te diré que encontraré en tu corazón. Encontraré músculo dañado, baja respuesta de glóbulos rojos, y debilidad en=2 0las paredes y vasos. Y aparte me daré cuenta si te podamos ayudar o no.

- ¿Pero encontrará a Jesús allí también? Es su hogar, Él vive allí, siempre está conmigo.

El cirujano no toleró más los insistentes comentarios y se fue. Enseguida se sentó en su oficina y procedió a grabar sus estudios previos a la cirugía:

- Aorta dañada, vena pulmonar deteriorada, degeneración muscular cardiaca masiva. Sin posibilidades de trasplante, difícilmente curable. Terapia: analgésicos y reposo absoluto. - Pronóstico: tomó una pausa y en tono triste dijo:

- Muerte dentro del primer año.

Entonces detuvo la grabadora.

- Pero, tengo algo más que decir: - ¿Por qué? pregunto en voz alta -¿Por qué hiciste esto a él? Tú lo pusiste aquí, tú lo pusiste en este dolor y lo has sentenciado a una muerte temprana. ¿Por qué?

De pronto, Dios, nuestro Señor le contestó:

- El niño, mi oveja, ya no pertenecerá a tu rebaño porque él es parte del mío y conmigo estará toda la eternidad.

Aquí en el cielo, en mi rebaño sagrado, ya no tendrá ningún dolor, será confortado de una manera inimaginable para ti o para cualquiera.

Sus padres un día se unirán con él, conocerán la paz y la armonía juntos, en mi reino y mi rebaño sagrado continuará creciendo.

El cirujano empezó a llorar terriblemente, pero sintió aun más rencor, no entendía las razones. Y replicó:

- Tú creaste a este muchacho, y también su corazón ¿Para qué? ¿Para que muera dentro de unos meses?

El Señor le respondió:

- Porque es tiempo de que regrese a su rebaño, su tarea en la tierra ya la cumplió.

Hace unos años envié una oveja mía con dones de doctor para que ayudara a sus hermanos, pero con tanta ciencia se olvidó de su Creador. Así que envié a mi otra oveja, el niño enfermo, no para perderlo sino para que regresara a mí aquella oveja perdida hace tanto tiempo.

El cirujano lloró y lloró inconsolablemente. Días después, luego de practicar la cirugía, el doctor se sentó a un lado de la cama del niño; mientras que sus padres lo hicieron frente al médico. El niño despertó y murmurando rápidamente preguntó:

- ¿Abrió mi corazón?

- Si - dijo el cirujano-

- ¿Qué encontró? - preguntó el niño -

- Tenías razón, encontré allí a Jesús.

viernes, 27 de noviembre de 2009

Las aspas del molino sólo se mueven si hay viento


Hay personas que basan su vida en los recuerdos. Salvador lleva tres años lamentándose y dándole vueltas a cómo sería su vida si su madre no hubiera muerto. Dice que su madre era una gran mujer, que se preocupaba de sus hijos, que nunca permitió que pasaran hambre y que si no hubiera fallecido ahora él podría estudiar, ir a la Universidad y que su vida sería feliz. Pero Salvador lleva tres años sin hacer nada, no se ha movido de su sitio. Ni trabaja ni estudia, sólo ve pasar la vida.

Mariluz perdió a su marido hace siete años. Tiene tres hijos de entre diez y veinte años. Mariluz no consigue quitar de su cabeza la idea de que todos los proyectos que tenía con su marido, poner una tienda, hacer un crucero por el Caribe, comprarse una casa en la playa, se esfumaron cuando él se marchó. Mariluz se lamenta constantemente de lo feliz que era antes y lo desgraciada que es ahora.

Javier y su familia tuvieron que cambiarse de ciudad al conseguir un nuevo trabajo, con el que iba a ganar mucho más dinero. Con ese dinero extra podrían cumplir sus sueños, comprar una casa y un nuevo automóvil. Han podido comprar una casa nueva y un nuevo automóvil, pero Javier se queja de que ya no tiene amigos como tenía en su antigua ciudad. Se siente abatido y no para de pensar en lo que se está perdiendo.

Los recuerdos son geniales, pero nunca permitas que arrojen su sombra sobre tus sueños.

Otras personas basan su vida en el futuro. Andrés lleva tres años imaginando el negocio que quiere crear. Es una idea increíblemente buena, original, única. El mes que viene comenzará a hacer las diligencias legales. El mes que viene empezará a buscar financiación. El mes que viene intentará buscar un local comercial bien situado. Lleva así tres años. Mientras tanto sigue trabajando doce horas diarias como vigilante jurado.

Minerva se siente muy sola. Está segura de que dentro de poco todo cambiará: encontrará nuevos amigos, buscará un trabajo muy creativo, que es lo que a ella le gusta, podrá comprarse una casa y salir de la casa paterna, encontrará a un novio que le quiera, el príncipe de sus sueños, y conseguirá ser feliz.

No pases demasiado tiempo preocupándote por el futuro o te olvidarás de vivir. Sólo se puede vivir hoy.

Escrito por Ricardo Ros

LA FUERZA DEL AMOR

El núcleo del amor es la fuerza, el valor que mostramos para luchar por lo que amamos, la fortaleza para defender lo que más apreciamos, enfrentar desafíos, superar barreras, derribar obstáculos.

Cuando el amor es auténtico surge con la fuerza de la audacia, el atrevimiento, la osadía que nos lanza a correr riesgos para conquistar lo que amamos; es en esa entrega sin condiciones donde surgen fortalezas donde antes no las había.

El amor nos da el valor de:

- Luchar por nuestros sueños.

- Dar la vida por los que llevamos en el corazón.

- Modificar nuestra propia existencia.

- Cambiar nuestro ser.

- Rebasar el límite de nuestras potencialidades.


El amor nos da la fuerza:

- Para respetar a los seres que amamos.

- Para sonreír a pesar de las adversidades.

- De la humildad para pedir perdón.

- La grandeza de la comprensión.

- La nobleza de perdonar.


El amor nos da el poder:

- Para manifestar nuestras emociones.

- Para alcanzar estrellas.

- Para convertir nuestros sueños en realidades.

- Entregar nuestra vida por un ideal.


El amor nos transforma en seres superiores, nos despierta nuestra capacidad de asombro, nos da la sensibilidad de la contemplación, nos impulsa a niveles infinitos, nos da la fuerza para recorrer nuestra vida con un espíritu invencible y nos impulsa a alcanzar lo imposible.

El amor es la fuerza que Dios deposita en el corazón de todos los seres humanos, a cada uno corresponde decidir vivir como un paladín o un cobarde, como un conquistador o un conformista, como un ser excelente o un mediocre, como un ser lleno de luz o quien permanece por siempre en la oscuridad, el amor hace nacer la fuerza para atrevernos a ser auténticos colaboradores en la grandeza de la creación.

-Amar a tu prójimo como a ti mismo

- El valor para luchar por tus hijos.

- Cuidar de tus padres.

- Hacer feliz a tu pareja.

- Conceder el perdón a tu enemigo.

- Pedir humildemente perdón a quien ofendiste.

Pregúntate:

¿Tienes la fuerza para amarte a ti mismo, de convertirte en el ser que estás llamado a ser?

¿Te atreverías a hacer de tu vida una obra magistral digna de las manos que te crearon?

¿Tendrás el valor de ser un auténtico hijo de Dios?

¿Tienes la fuerza del amor?

 ~ Autor desconocido ~

viernes, 20 de noviembre de 2009

Cómo amar a los adultos mayores

DÉJALO HABLAR.....porque hay en su pasado un tesoro lleno de verdad, de belleza y de bien.

DÉJALO VENCER.....en las discusiones, porque tiene necesidad de sentirse seguro de sí mismo.

DÉJALO IR A VISITAR....a sus viejos amigos porque entre ellos se siente revivir.

DÉJALO CONTAR....sus historias repetidas, porque se siente feliz cuando lo escuchamos.

DÉJALO VIVIR ....entre las cosas que ha amado, porque sufre al sentir que le arrancamos pedazos de su vida.

DÉJALO GRITAR....cuando se ha equivocado. porque los ancianos como los niños tienen derecho a la comprensión.

DÉJALO TOMAR UN PUESTO. en el automóvil de la familia cuando van de vacaciones, porque el año próximo tendrás remordimientos de conciencia si el abuelito ya no existe más.

DÉJALO ENVEJECER....con el mismo paciente amor con que dejas crecer a tus hijos, porque todo es parte de la naturaleza.

DÉJALO REZAR...como él sabe; como él quiere, porque el adulto mayor descubre la sombra de DIOS en el camino que le falta recorrer.

DÉJALO MORIR ......entre brazos llenos de piedad, porque el AMOR de los hermanos sobre la tierra, nos hace presentir mejor el torrente infinito de amor del PADRE en EL CIELO.

Autor? No importa... Ámalos

Lic. Graciela E. Prepelitchi

Oración de San Francisco de Asís

¡Señor!

Haz de mi un instrumento de Tu Paz.

Que donde haya odio, yo ponga Amor.

Donde haya ofensa, yo ponga Perdón.

Donde haya duda, yo ponga Fé.

Donde haya error, yo ponga Tú Verdad.

Donde haya tinieblas, yo ponga Luz.

Donde haya discordia, yo ponga Unión.

Donde haya desesperación, yo ponga Esperanza.

Donde haya tristeza, yo ponga Alegría.

Concédeme Señor la gracia,

de no buscar tanto ser amado como amar;

ser comprendido como comprender;

ser consolado como consolar,

porque dando es como recibimos,

perdonando es como somos perdonados y

muriendo en Tí,  es como nacemos a la Vida Eterna.

miércoles, 18 de noviembre de 2009

¿COMO SE HACE LA VIDA?

La vida se hace sorbo a sorbo, paso a paso y día a día.

Se hace saboreando a Dios, caminándolo a lo ancho y a lo hondo, mirándolo a través de sus colores, oyéndolo a través de sus sonidos, palpándole la perfección y desentrañándole la luz.

La vida se hace como trabajador de su siembra, como obrero de su palabra, como jardinero de sus flores, como cantador de sus prodigios... como El te mandó hacerla.

La vida se hace agitando el mundo que llevamos dentro y descubriendo el mundo que llevan los demás.

Se hace respirando a Dios con la fuerza de la naturaleza, con la sabiduría de su gracia y con el impulso de sus pisadas, que van tras nosotros para que no perdamos el camino ni se nos distraiga la luz.

La vida se hace sufriendo, pero sin apagar nunca la velita encendida de la fe.

La vida se hace amando, porque el amor tiene tanto que hacer en el mundo, que no da tiempo para odios ni rencores.

La vida se hace en el espacio de lo cotidiano, en pequeños trozos de cada día, en raticos, en raticos que encendemos de pasión, en vuelos que se emprenden con besos y son sueños.

Velar y dormir, soñar y despertar, llorar y reír, creer y dudar, caer y levantarse: eso es hacer la vida.

La vida no se hace para lucir, para exhibirse, para mostrarnos como en un escaparate de vanidad y focos de colores.

La vida se hace en el recinto íntimo, en ese taller de abeja trabajadora que llevamos dentro, en ese aguijón que extrae y regala, que profundiza y endulza.

La vida se hace en el centro de trabajo de uno mismo, con su esfuerzo silencioso, efectivo, constante, devoto y masivo. Un esfuerzo que abre surco y un surco hecho para que no deje de producir.

Hacer la vida no es diseñarla a nuestro antojo, ni coserla a nuestro capricho: es estar siempre en las puntadas de su tela y en el estambre de su tejido.

Hay que caminar la vida, porque es la única manera de llegar.

Irla resolviendo con la lógica, pero emocionándola con el espíritu y calentándola con el corazón.

La vida se hace cuando das la mano y trasmites una corriente, cuando das una sonrisa y cuelas la luz, das un beso y cierras los ojos, te das a ti mismo… ¡y parece que concentras el universo en tu corazón!

La vida se hace en el espacio de tu mundo y en donde se libran las batallas de los demás.

Se hace en el horizonte de ti mismo y en donde vuelan los sueños de los otros, en la siembra frondosa de tu tierra y en la raíz raquítica del huerto ajeno.

La vida se hace de regalo, sin seleccionar, ni preguntar, ni escoger.

Cumple tu misión de dar. Déjale a Dios el balance de lo que debes recibir.

Porque en ese libro de la generosidad, del esfuerzo y de la entrega, ¡se hace la vida!


~ Autor desconocido ~

lunes, 16 de noviembre de 2009

Cerré los ojos.... y me encontré

Me senté y cerré los ojos y entonces me vi... me vi a mi, llena, repleta de amor que no había dado, de amores que nunca habían sido amores, rodeada de personas que no me interesaban. Entonces paré... Y me acordé que me habían amado, que había personas que realmente se interesaban por mi.
Me acordé de cada una de las tarde donde me había dedicado a caminar en silencio por la calle, con la cabeza solamente en el canto de los pájaros, sintiendo el aroma de cada una de las flores, la manzanilla que brota en el barrio y ya lo hacía desde mi infancia.

Viajé hasta mi infancia, cuando me sentaba bajo los árboles para escribir cartas de amor que nunca iba a dar, me acordé cuando me escondía atrás de los árboles para ver ese chico que robaba todos mis sueños, mientras que soñaba, vivía una vida nueva, llena de felicidad, un sueño que no terminaba nunca.

Y fui a mi adolescencia metida atrás de libros que contaban grandes historias de amor, donde yo podía seguir imaginando mi futuro, cada tanto agarraba de nuevo mi cuaderno y escribía una poesía tonta para el amor del momento, ese amor, ese amigo que nunca se había fijado en mi.

Las tardes de mate y galletitas con Daniela hablando de chicos y las siestas en casa de Mariana después de comer la polenta que nos hacía su abuela, las escapadas a fumar con Lorena cuando ya no queríamos hacer mas gimnasia, los chicos malos del barrio con los que nos gustaba charlar, para estar al tanto de los últimos robos, como si eso nos diera seguridad, los domingos en la cancha con mi papá, y las tardes de fin de semana interminables, entre caballos y pasto mirando un cielo que algún día sería mío.

Y llegué a la casi madurez, los veranos en la costa, conquistando corazones inconquistables, con una histeria estúpida, tomando sangría o la bebida del momento, corriendo durante ratos por la playa para no perder la costumbre de correr y con los pies descalzos por la playa no olvidarme que podía caminar despacio también.

Me acuerdo que un día me desperté y dije, bueno ya soy grande y busqué un trabajo, ya no me divertía salir, ya no me divertía tomar, ya no me divertía hablar con los chicos malos del barrio, pero todavía me sentaba abajo de un árbol a escribir o leer, o de espaldas al cielo viendo como las hormigas hacen su trabajo con una rigidez casi absoluta, o miraba el cielo y seguía pensando "un día eso va a ser mío" y me iba en una nube a recorrer el mundo que habitaba en mi cabeza, las pirámides de Egipto, las playas de México, las Navidades de New York, los trenes de Tokio, la muralla china, el camino del inca, Roma, París, Madrid, Manchester que siempre fue un lugar de ensueño, cada lugar era un misterio.

Conocía personas mentalmente, imaginaba situaciones divertidas y ridículas, nunca perdí la facilidad de reirme sola y sin sentir vergüenza, sin creer que estará pensado la gente de mi sonrisa.

Cuando abrí los ojos me di cuenta que soy una nena que todavía mira el cielo sabiendo que lo puede conquistar cuando quiera, y una mujer que lucha por alcanzar todos los sueños, sabiendo que disfruto cada partícula del tiempo que le fue dado.



jueves, 12 de noviembre de 2009

Recuerda siempre

Ser tan fuerte que nada pueda perturbar tu paz; Hablar de felicidad y prosperidada toda persona que conozcas; Hacer que todos tus amigos sientanque hay algo de valor dentro de ellos; Mirar el lado bueno de todas las cosas,y hacer que este optimismo se haga verdadero; Pensar sólo lo mejor, trabajar para lo mejor y esperar sólo lo mejor; Sentirte tan entusiastacon el éxito de los demás como con el propio; Olvidar los errores del pasadoy aferrarte a los grandes logros que ya estásalcanzando y que alcanzarás en el futuro; Brindarte a cada criatura viviente que halles a tu pasocon una sonrisa; Ocuparte tanto del mejoramiento de ti mismo,que no te sobre tiempo para criticar a los demás; PORQUE TÚ ERES: Demasiado grande para preocuparte; Demasiado fuerte para temer; Demasiado noble para encolerizarte; Demasiado establepara no tolerar la presencia de las dificultades. SONRÍE SIEMPRE Y NO TE OLVIDES: El pesimismo conduce a la debilidad; El optimismo a la fortaleza.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

FUERZA Y CORAJE

Es preciso tener fuerza para ser firme,pero es preciso tener coraje para ser gentil.Es preciso tener fuerza para defenderse,pero es preciso tener coraje para bajar la guardia.Es preciso tener fuerza para ganar una guerra,pero es preciso tener coraje para rendirse.Es preciso tener fuerza para estar en lo cierto,pero es preciso coraje para tener duda.Es preciso fuerza para mantenerse en forma,pero es preciso coraje para mantenerse en pie.Es preciso tener fuerza para sentir el dolor de un amigo,pero es preciso coraje para sentir los propios dolores.Es preciso tener fuerza para soportar el abuso,pero es preciso coraje para hacerlo parar.Es preciso tener fuerza para quedarse solo,pero es preciso tener coraje para pedir apoyo.Es preciso tener fuerza para amar,pero es preciso tener coraje para ser amado.Es preciso tener fuerza para sobrevivir,pero es preciso coraje para vivir.

viernes, 6 de noviembre de 2009

Reflexiona...

Reflexiona.
Usa sabiamente tu inteligencia.
Busca lo que no está a simple vista.
Insiste en descubrir los misterios.
Analiza para que entiendas.
Sintetiza para que compendas.
El cuerpo toma los nutrientes y el resto lo desecha.
Haz lo mismo desde tu consciencia.

Reflexiona.
Usa ese recurso poderoso.
Filtra para que no tragues piedras.
Distingue lo esencial de lo trivial.
Lo valioso de lo inútil.
Lo transitorio de lo eterno.
Lo trascendental de lo mundano.
No llenes tu cabeza con basura.

Reflexiona.
Que el azar no controle tu destino.
Las obras más valiosas no se deben a la suerte.
Provienen de inteligencia, consciencia y trabajo.
Cuando uses tu discernimiento, deja espacio para la intuición.
La reflexión es el contrapeso de las emociones.
La manilla que regula el flujo intenso.
La base del cálculo y de la prudencia.
Una condición para la convivencia.
Un ejemplo vivo de la evolución humana.
Nuestra oportunidad sobre las bestias.

Reflexiona.


"EL MENSAJE DE LOS SABIOS"

lunes, 2 de noviembre de 2009

¿Como se hace la vida?

La vida se hace sorbo a sorbo, paso a paso y día a día.Se hace saboreando a Dios, caminándolo a lo ancho y a lo hondo, mirándolo a través de sus colores, oyéndolo a través de sus sonidos, palpándole la perfección y desentrañándole la luz.

La vida se hace como trabajador de su siembra, como obrero de su palabra, como jardinero de sus flores, como cantador de sus prodigios... como El te mandó hacerla.

La vida se hace agitando el mundo que llevamos dentro y descubriendo el mundo que llevan los demás.

Se hace respirando a Dios con la fuerza de la naturaleza, con la sabiduría de su gracia y con el impulso de sus pisadas, que van tras nosotros para que no perdamos el camino ni se nos distraiga la luz.

La vida se hace sufriendo, pero sin apagar nunca la velita encendida de la fe.

La vida se hace amando, porque el amor tiene tanto que hacer en el mundo, que no da tiempo para odios ni rencores.
La vida se hace en el espacio de lo cotidiano, en pequeños trozos de cada día, en raticos, en raticos que encendemos de pasión, en vuelos que se emprenden con besos y son sueños.

Velar y dormir, soñar y despertar, llorar y reír, creer y dudar, caer y levantarse: eso es hacer la vida.

La vida no se hace para lucir, para exhibirse, para mostrarnos como en un escaparate de vanidad y focos de colores.

La vida se hace en el recinto íntimo, en ese taller de abeja trabajadora que llevamos dentro, en ese aguijón que extrae y regala, que profundiza y endulza.

La vida se hace en el centro de trabajo de uno mismo, con su esfuerzo silencioso, efectivo, constante, devoto y masivo. Un esfuerzo que abre surco y un surco hecho para que no deje de producir.

Hacer la vida no es diseñarla a nuestro antojo, ni coserla a nuestro capricho: es estar siempre en las puntadas de su tela y en el estambre de su tejido.Hay que caminar la vida, porque es la única manera de llegar. Irla resolviendo con la lógica, pero emocionándola con el espíritu y calentándola con el corazón.

La vida se hace cuando das la mano y trasmites una corriente, cuando das una sonrisa y cuelas la luz, das un beso y cierras los ojos, te das a ti mismo… ¡y parece que concentras el universo en tu corazón!

La vida se hace en el espacio de tu mundo y en donde se libran las batallas de los demás.Se hace en el horizonte de ti mismo y en donde vuelan los sueños de los otros, en la siembra frondosa de tu tierra y en la raíz raquítica del huerto ajeno.

La vida se hace de regalo, sin seleccionar, ni preguntar, ni escoger.Cumple tu misión de dar. Déjale a Dios el balance de lo que debes recibir.Porque en ese libro de la generosidad, del esfuerzo y de la entrega, ¡se hace la vida!